
El calor es insoportable en el cuarto, y yo no puedo ni respirar. Desde hace días, siento como si me ahogase en casa, entre estas paredes, bajo estas sábanas, junto a ella. No ha cambiado nada, en realidad creo que es ese el problema. Todo es igual, hace años que todo me resulta monótono, me aburro. Me siento miserable, insatisfecho y ahorcado, pero en lo único que pienso es en escapar, dejarlo todo y mandar a la mierda a todos, y a ella. Ella que ya no me hace sentir el amor que nos teníamos, no siento ni el suyo ni el mío. Ella que me ignora, yo que la rehuyo, nos esquivamos y tratamos de no tropezar ni siquiera en la cama. Y yo no sé ni cuando empezó a morir lo nuestro, ni cómo fue agonizando, pero poco a poco se ha ido y se ha llevado el resto de mi vida, agotando las ilusiones en el trabajo, que ahora solo es la excusa para ocupar más tiempo fuera de casa y no pensar en lo que me espera al terminar el día.
Muchas veces hemos intentado reflotar la pasión, tal vez sin querer hacerlo, pero nunca ha dado resultado y nos hemos desgastado más y más al comprobar que ya no hay fuerzas, no hay nada que rescatar.
Yo quiero salir de mi cuerpo, mirarme a la cara y decirme que soy un cobarde, que no afronta su propia infelicidad, que no se decide a dejarlo todo y empezar de nuevo, solo, pero sin esa miseria que se nos come cada día. Hace tanto que no estoy solo que no se ni como me sentía.
Y ella, por qué no hace nada ella. Por que no me dice que se siente tan vacía como yo, o más incluso, ella que siempre fue tan exigente conmigo. Un día dejó de quejarse, y ya no me pedía que volviese antes a casa, que dejara de ver a unos o a otros, simplemente un día dejó de pedir, y yo creo que se rindió. Seguro que dejó de esperar cosas de mi, perdió el interés por mi, se agotó. Y yo lo sabía, dejé que pasase y no me importó, ni me importa. Tantos años y lo único que quiero es dejarlo todo y sentir alivio, lo quiero, y no se como se hace.
A veces hasta siento un cierto asco de cosas sin sentido, cosas que siempre ha hecho y que nunca tuvieron importancia, cosas como notar su olor en mi lado de la almohada o en la toalla del baño. Me enferma oler su perfume por todas partes, en el armario, en mi ropa, en el sofá cuando duermo en él para no acostarme a su lado.
Ya no puedo respirar, este calor me está asfixiando, esta habitación, la casa. Ya no puedo respirar.
Muchas veces hemos intentado reflotar la pasión, tal vez sin querer hacerlo, pero nunca ha dado resultado y nos hemos desgastado más y más al comprobar que ya no hay fuerzas, no hay nada que rescatar.
Yo quiero salir de mi cuerpo, mirarme a la cara y decirme que soy un cobarde, que no afronta su propia infelicidad, que no se decide a dejarlo todo y empezar de nuevo, solo, pero sin esa miseria que se nos come cada día. Hace tanto que no estoy solo que no se ni como me sentía.
Y ella, por qué no hace nada ella. Por que no me dice que se siente tan vacía como yo, o más incluso, ella que siempre fue tan exigente conmigo. Un día dejó de quejarse, y ya no me pedía que volviese antes a casa, que dejara de ver a unos o a otros, simplemente un día dejó de pedir, y yo creo que se rindió. Seguro que dejó de esperar cosas de mi, perdió el interés por mi, se agotó. Y yo lo sabía, dejé que pasase y no me importó, ni me importa. Tantos años y lo único que quiero es dejarlo todo y sentir alivio, lo quiero, y no se como se hace.
A veces hasta siento un cierto asco de cosas sin sentido, cosas que siempre ha hecho y que nunca tuvieron importancia, cosas como notar su olor en mi lado de la almohada o en la toalla del baño. Me enferma oler su perfume por todas partes, en el armario, en mi ropa, en el sofá cuando duermo en él para no acostarme a su lado.
Ya no puedo respirar, este calor me está asfixiando, esta habitación, la casa. Ya no puedo respirar.
Nenhum comentário:
Postar um comentário